Pic d'Estauas (2.749 m) por Gorgutes

Ascenso a la gran aguja de Gorgutes: el Estauas

Los tres picos de Estauas y la aguja que forma el contrafuerte sureste del último y más alto, tal como se ven ascendiendo al Ibón de Gorgutes.

Los rebaños de gente que transitan por los Llanos del Hospital y los muchos montañeros que también pasan por esta zona en búsqueda de las grandes montañas del final del Valle de Benasque suelen fijarse en tres grandes agujas que destacan poderosamente por encima del gran rellano donde está el Hospital de Benasque

Situadas al fondo del Valle de Gorgutes, estas tres vistosas torres metamórficas son los picos de Estauas, y tienen una altura similar, aunque su dificultad varia notablemente entre cada una de ellas. Mientras que el pico meridional es el más sencillo de todos, pues desde el Puerto Biello es una simple ladera de hierba, el central es un espectacular torreón que requiere de técnicas de escalada pues está separado de sus hermanos por dos profundas brechas. El septentrional, cuyo pico es el más alto de la tríada, está en un rango intermedio de dificultad, pues aunque cualquier montañero avezado puede hollar su cumbre, el ascenso pasa por una zona de alta exposición, por la verticalidad y lo descompuesto del terreno.

Lo que si comparten estas tres cumbres es la soledad y el gran ambiente, pues aunque por la cima sur aún pasa gente, por lo cercana que está del Puerto Biello (puerto bastante poco conocido), por las otras dos muy pocos montañeros pueden decir que las han ascendido. Y es que, el estar en el valle más famoso del Pirineo tiene su precio. Incluso dentro de Gorgutes, que es objetivo de muchos excursionistas, la mayoría de montañeros prefieren ir a la cumbre más fácil, el Sacroux o a la más alta, el Malh Pintrat, quedando la segunda montaña en importancia del valle relegada a un tercer plano. En esta ruta se quiere enseñar esta montaña para los que quieran descubrir una montaña salvaje y brutal en uno de los rincones más bellos del Valle de Benasque.

Ficha técnica

Desnivel: 1000 m

Longitud: 9 km

Altura mínima: 1.780 m

Altura máxima: 2.749 m

Dificultad técnica: El ascenso final a la cumbre es expuesto, vertical y por un terreno bastante descompuesto, con pasos de trepada constantes que no llegan a superar el II grado.

Track en Wikiloc

Mapa de la ruta realizada tomado en el visor Iberpix

Acceso

El inicio de esta ascensión es el final de la carretera del Valle de Benasque, pasado el desvío al Hospital de Benasque. Calcula la ruta desde cualquier punto de inicio pulsando este enlace a Google Maps.

Fotodescripción


La carretera del Valle de Benasque se trunca repentinamente, a la espera de que se resuelva el polémico proyecto del túnel que uniría el Valle de Benasque con Bagneres de Luchon y que hace años que dura. De momento, este punto es bien útil para los montañeros, puesto que sirve como inicio a las rutas del Valle de Gorgutes. El primer tramo de la subida es el más pendiente, pues el camino asciende con decisión por un bosque, teniendo que superar varios resaltes de piedra y tramos encharcados por la cercanía de un caudaloso barranco que cae del Mall Pintrat.

Cuando el sendero entra en el Valle de Gorgutes, el panorama se abre. El sendero se dirige hacia el norte, para cruzar el Barranco de Gorgutes, que cae con fuerza con el agua del ibón, algo más alto.

Al fondo del valle, las tres puntas del Estauas. Ascenderemos a la que está en el centro de la foto, la más septentrional. La punta que se ve a la derecha es un contrafuerte de la cresta sureste del pico principal.

El sendero, tras cruzar el barranco, traza una gran diagonal hacia la derecha, para esquivar el muro que defiende el fondo del circo. Tras ascender unos cien metros y llegar bajo las paredes de la Montañeta, el sendero vuelve a girar, yendo ahora en dirección a la cubeta del ibón y a los Picos de Estauas, separados del colorido Malh Pintrat por la brecha del Puerto Viello.

Las cumbres de Estauas son bien altivas, auténticos nidos de águilas, sobre todo el central. El principal queda algo escondido tras el contrafuerte.

Girando la cabeza, el Pico de la Montañeta no se queda atrás, aunque su cara este es mucho más plácida.

Tras pasar por el Turonet de Gorgutes, vamos entrando en la cubeta del Ibón de Gorgutes. A la vez, se va abriendo la cabecera de Gorgutes, entre Estauas y el Sacroux, cuya pequeña cima se ve al fondo.

El precioso Ibón de Gorgutes, bien encajonado entre el contrafuerte del Estauas y la Tuca de la Glera.

Ya tenemos el Puerto de la Glera a la vista. Para llegar a él tenemos que llegar al final del ibón y subir por la pedrera unos 50 metros de desnivel.

Llegamos al Puerto de la Glera, uno de los collados que separan el valle de Benasque del valle de Luchon, a mucha inferior altura. Por ello, la vertiente francesa del Puerto se hunde abruptamente, a diferencia de la española, que cae de forma mucho más gradual. Sin embargo, nosotros giramos la mirada hacia el oeste, hacia la cabecera de Gorgutes, que forman el Sacroux y el Estauas, aprovechando el buen sendero que conduce al primer pico, un clásico del valle.

Tras ascender por la parte derecha del valle y cuando el sendero emprende el ascenso final al Sacroux, nosotros lo abandonamos para dirigirnos a la base del Estauas, con su tremenda cara este enfrente nuestro.

La primera parte del flanqueo va por viras herbosas, mientras vamos esquivando espolones rocosos que caen de la cresta que une el Sacroux con el Estauas.
Croquis de la ruta de ascenso. A través de la pedrera ganamos la canal diagonal por la que superamos la primera sección de la pared. Girándonos, llegamos a la brecha Celinda, desde la cual seguimos una vira poco inclinada en la que apenas ganamos altura y que nos sitúa en mitad de la cara este del Estauas. Ahí, se abre un cóncavo en la pared por el que ascendemos, por donde mejor nos parece, hasta la cresta somital, desde la que en poco llegamos a la cumbre.

Tras cruzar la pedrera, bastante estable, llegamos a la base de la canal, algo vertical y con bastante piedra suelta.

Mirando atrás, la cumbre del Sacroux apenas se distingue de su cresta.

Y Gorgutes abajo, el Pic de la Montañeta queda empequeñecido ante las grandes montañas que aparecen en el horizonte: el piramidal Salvaguardia y el afiladísimo Pico de la Mina y sus agujas.

Empezamos a subir por la canal diagonal, ocupada por bastante piedra suelta. La canal es fácil pero vertical, con un par de pasos de primer grado. 

Al final de la canal hay un pequeño rellano herboso desde el cual se aprecia la verticalidad de la canal, ya que en apariencia solo hay vacío de donde venimos. 

La torre del Bonneco y el más achatado Sacroux, las otras cumbres de la cabecera de Gorgutes.

A la izquierda de la Punta Celinda, aparece la brecha a la que tenemos que llegar, para lo cual trazamos otra diagonal, esta vez más fácil, por unas terrazas inclinadas.

Mirando arriba, la gran pared del Estauas, cuyo ascenso parece imposible. Sin embargo, hacia la izquierda vemos una sección algo más tumbada y con algo de hierba. Por ahí vamos a subir.

Desde la brecha, una sombría canal baja hasta el Lac Celinda.

Mirando hacia arriba, las grandes cumbres de Lys, destacando el Maupas y el Grand Quayrat.

Bajo el frontón oriental del Estauas, una rocosa vira ligeramente inclinada nos permite cruzar la cara este sin ganar altura en dirección al cóncavo que se ve al fondo. La vira es sencilla, pero ingentes cantidades de piedrecilla suelta la inundan, lo que nos obliga a vigilar cada paso para no irnos abajo.

En un momento dado, aparece un hito que nos indica que nuestro trayecto por la vira ha terminado, a pesar de que más adelante una pequeña pradera de hierba aparece en mitad de la pared que nos puede engañar. Apréciese el vacío que se abre detrás.

Desde la parte inferior, la pared que debemos trepar pinta de esta manera. No es completamente vertical y no tiene pasos de mucha dificultad, como mucho unos cuantos de segundo grado. Sin embargo, el problema es de la gran cantidad de piedra suelta que hay por toda la pared y que da mucha inseguridad a la hora de trepar.

Este cóncavo tiene tramos con algo de hierba y otros de más rocosos. Varios tubos van esquivando espolones que caen de la cresta, que vemos arriba de todo y a donde debemos llegar. Sin embargo, no la atacaremos de frente, sino que la ganaremos yendo hacia la izquierda, donde su acceso es más sencillo. Desde la cresta, la cima está a pocos minutos.
Llegamos por fin a la cresta, repleta de afilada roca metamórfica pero que no tiene dificultad alguna, más allá del notable patio que hay en ambos lados.

La cumbre del Pic d'Estauas, más ancha de lo esperado.

La portentosa aguja del Pic Central d'Estauas, entre el Malh Pintrat y el Malh Plane, poco antes de la cumbre. Desde aquí se ve bien la tremenda brecha que nos separa de esta difícil cumbre, sin duda una de las más complicadas y menos ascendidas del valle de Benasque.

Desde la cumbre se ve también el Pico Sur de Estauas, bajo la mole del Malh Pintrat, la gran cumbre de Gorgutes.

Siguiendo la cresta, desde el Fouillouse la altura empieza a ascender hasta llegar a las grandes cumbres del Cirque du Lys, capitaneadas por el Maupas.

Hacia el norte, el Sacroux marca el punto más septentrional del Valle de Benasque, tras el cual el terreno se hunde sobre los valles franceses, de mucha menor altura que los españoles.

Tras las paredes del Pic de la Glera y de la Montañeta, la divisoria sigue hacia el este, con el horizonte completamente emborronado debido a la intensa calima provocada por una potente nube de polvo sahariano.

Aunque de altura modesta, el Salvaguardia y el Pico de la Mina, alineadas en esta fotografía, son de las montañas más bonitas y altivas de todo el valle.

Para cerrar el círculo, la Maladeta y sus hermanas más occidentales dominan indiscutiblemente el Valle de Benasque, pues el Aneto queda escondido tras su cumbre.

Así pues, tras un rato de descanso, nos disponemos a volver por el mismo sitio. Empezamos a descender por la cresta, para ir a buscar el cóncavo de nuevo.

Aunque la cresta es sencilla, con apenas unos pocos pasos de trepada, es muy aérea, con mucho ambiente.

Llegamos de nuevo al cóncavo herboso, por donde hemos subido y por donde bajaremos, de nuevo buscando siempre el mejor paso y con la adrenalina a tope, ya que la bajada es mucho más impresionante y compleja que el ascenso.

Descendiendo, vemos la brecha Celinda, donde tenemos que llegar.

El descenso es de vértigo. Al fondo del muro, la vira herbosa que nos llevará de nuevo a la Brecha Celinda.

De nuevo en la vira, la volvemos a tomar en dirección a la brecha, que en la foto no se aprecia del todo bien por la presencia de la Punta Celinda detrás de la misma.

Desde la vira y terminadas ya las principales dificultades, vista atrás por donde hemos descendido.

Una vez en la brecha y descendidos a la base de la montaña, solo quedará volver al sendero del Sacroux. Desde el mismo, el Puerto de la Glera, que se ve en esta foto bajo el agreste Tuc de la Glera, queda cerca ya y con él, el sendero que utilizaremos para descender de Gorgutes tras haber culminado una de sus principales cumbres.