Cuando el cordal fronterizo pirenaico deja el macizo del Perdiguero-Gourgs
Blancs (el que concentra el mayor número de tresmiles del Pirineo) y supera por
última vez la cifra mágica en el Pico de Boum, la altura baja y empieza un
cordal generalmente más amable y herboso, aunque no por ello deja de ser menos
vertical en ocasiones. La cumbre más destacada de esta zona es de las más
visitadas no solo del Valle de Benasque sino que me atrevería decir también
del Pirineo y no es otro que el Salvaguardia. Sin embargo, existen multitud de
cumbres más en este cordal que repiten las condiciones que convierten al
Salvaguardia en una de las cimas más bonitas de la zona que son su altivez,
panorámica y facilidad como las Tucas de Bargas, el Cap dera Picada y la cumbre
que vamos a detallar en esta reseña, la Tuca Blanca de Pomero.
La Tuca Blanca de Pomero es el pico que se sitúa en la vertical del
archiconocido Plan d’Aigualluts, viéndose ya desde La Besurta como una ligera
prominencia que destaca sobre la homogeneidad del cordal al que pertenece. El
color viene dado por unas rocas de esa tonalidad que se encuentran presentes en su, parece, poco “destacada”
vertiente oeste. Aun así, como se ve, a medida que nos vamos acercando a esta
montaña vemos cómo sus formas se van afilando hasta formar un colmillo esbelto
que aun su aspecto intimidante, no ofrece dificultad para hollar su cima pero
debido a su lejanía, resulta muy poco conocida por el público. Además, ofrece
una panorámica extraordinaria sobre las Maladetas y sobre la Artiga de Lin y
Aigualluts sin las multitudes que las ocupan, puesto que seguramente estemos
solos desde el Col de Toro hasta arriba. Todos estos factores convierten a la
Tuca Blanca de Pomero en una cumbre muy atractiva para los montañeros amantes
de la soledad y de las grandes panorámicas. Además, podemos aprovechar para
hacer una cumbre secundaria que ofrece unas vistas inmejorables sobre el col de
Toro y su ibón, la Pena Nera.
Ficha técnica
Longitud: 16,5 km
Desnivel: 1.050 m
Altura mínima: 1.750 m
Altura máxima: 2.699 m
Dificultad técnica: I+ en la cresta a la Tuca Blanca de Pomero
Track en Wikiloc
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| Mapa de la ruta realizada tomada en el visor Iberpix |
Acceso
Para acceder a los Llanos del Hospital, el inicio de la excursión, se sigue la carretera principal del Valle de Benasque hasta ver el desvío del Hospital de Benasque, que debemos tomar. Para los que quieran reducir un poco la excursión, se puede empezar desde La Besurta pagando el autobús en meses de verano o en coche particular fuera de estos (mientras la nieve lo permita). Calcula la ruta desde cualquier punto de inicio pinchando este enlace a Google Maps.
Fotodescripción
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| Un día más el Salvaguardia observa como empezamos la ruta en los Llanos del Hospital. En primer lugar vamos por los prados de detrás del Hospital que es donde se hace el esquí nórdico en invierno. El camino pasa por el lado de los antiguos hospitales, destruidos por los aludes procedentes del Salvaguardia, que se yergue inexpugnable sobre nosotros y luego entra en un bosque, que tiene partes arrasadas por los mismos aludes. |
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| Poco a poco el bosque se va despejando y entra en el Plan de l’Están, donde nos encontramos con la carretera que va a la Besurta y que obviamos. No tardamos en llegar al parking de la Renclusa, donde tomaremos el trillado camino de Aigualluts y la Renclusa. En el Plan d'Están, con las cumbres de Remuñe en el horizonte. |
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| El mencionado sendero sube hasta la bifurcación de la Renclusa, que ignoramos, y sigue por el valle hasta llegar sin ningún problema hasta el magnífico Forau de Aigualluts, impresionante como siempre. |
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| Al llegar al final del Plan, un indicador nos señala el camino hacia el Col de Toro, al que debemos llegar. En un primer momento superamos un murete rocoso gracias a un camino empedrado que lo supera por la derecha. Vistas del plan de Aigualluts desde la parte alta del resalte. |
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| Vamos avanzando ahora por la parte derecha del Valle de la Escaleta, al principio bastante estrecho y rocoso. |
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| Avanzamos por el valle de la Escaleta hasta que nos separamos de la ruta del Molieres y nos dirigimos al Col de Toro, a nuestra izquierda, al que llegamos tras una breve subida. |
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| El ibón de Coll deth Hòro, una de las principales atracciones del valle de Benasque. |
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| La Pena Nera impone desde el Coll deth Hòro. Pero nos fijamos más en el diente que asoma a su izquierda, la Tuca Blanca de Pomero. Primero ascenderemos por las pendientes herbosas de la izquierda, esquivando las pedreras. |
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| Primero tenemos que subir el repecho herboso que nos separa del rellano de les Basetes de Col de Toro por un barranco al principio empinado y que luego se tumba. |
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| Al principio vemos algún hito disperso pero rápidamente desaparecen, aunque no son muy necesarios por lo claro del terreno. Nuestro siguiente objetivo es el collado 2.524 Iberpix, que está situado justo encima nuestro pero del que nos separan 200 metros de dura pendiente herbosa pero que se pueden hacer por casi cualquier sitio. |
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| Desde el collado, primero hacemos la Pena Nera de la que apenas nos separan 60 metros de terreno mixto muy fácil hasta llegar a su ancha cumbre situada justo enfrente del potente Malh dera Artiga. |
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| El terreno se desploma hacia el este en dirección al profundo boquete donde se asiente el ibón de Coll deth Hòro. |
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| Así se ve la Tuca Blanca de Pomero desde la Pena Nera. Ascenderemos por la arista oeste, bien resaltada contra el horizonte. Como se puede observar, es empinada pero fácil. |
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Tras volver al collado, empezamos la subida final a la Tuca Blanca de Pomero, primero por un resalte rocoso bastante erguido pero sencillo. El ascenso es bastante vertical pero con una roca excelente y algún mojón bien colocado nos guiarán por los mejores pasos hasta llegar a la cresta, desde la que veremos el pico ya bastante cerca. La cresta es aérea pero de una mayor facilidad que el murete anterior, muy disfrutona.
 | | Rápidamente la cresta se ensancha y llegamos a la cumbre de la Tuca Blanca de Pomero (2.699 m). |
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| El panorama occidental nos ofrece una visión poco común, puesto que podemos observar el escondido Lac de Pomero debajo de las blancas crestas que descienden de la Tuca Blanca hasta las Tucas de Bargas, que desde aquí no parece muy difícil pero muy aérea. |
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| Mención especial tienen los frontones norteños del Tempestades-Margalida y el monarca de los Pirineos, el Aneto, que tenemos justo enfrento nuestro. |
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| La visión más alpina de la Maladeta. |
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| También hay una vista espectacular del dúo Salvaguardia-Pico de la Mina, con sus afiladas agujas. |
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| Al observar como nubarrones negros procedentes de la zona del Posets están acercándose empezamos el descenso. Así que rápidamente pero con cuidado bajamos de nuevo al collado y desde éste, al Col de Toro, desde donde nos despedimos del diente de la Tuca Blanca de Pomero. |
